Suaves
almohadas que invitan a plácidos sueños.
Entre
cojines y almohadas se comparten secretos...
Las almohadas no son
sólo para dormir o reposar. Suelen ser el sostén de nuestra imaginación, de un
tiempo de divagaciones y de ensueños. Sobre la almohada nace a veces el poema,
surge la idea práctica o nos invade la nostalgia.
Un mullido cojín puede
aliviar un pesar, reconfortar, evocar recuerdos amables o ser el depósito del
llanto.
“Pon una hoja tierna de
la luna debajo de tu almohada y mirarás lo que quieras ver”. (Poesía, 288) Sabines
“La abeja laboriosa no tiene tiempo para la
tristeza”.
William Blake
“De la más fragante rosa nació la abeja más
bella,
a quien el limpio rocío dio purísima materia”.
Juana Inés de la Cruz
Oda a la abeja
Entra y sale del carmín, del azul,
del amarillo, de la más suave
suavidad del mundo:
entra en una corola
Entra y sale del carmín, del azul,
del amarillo, de la más suave
suavidad del mundo:
entra en una corola
precipitadamente,
por negocios,
sale con traje de oro
y cantidad de botas amarillas.
Perfecta desde la cintura,
el abdomen rayado
por barrotes oscuros,
la cabecita siempre preocupada
y las alas recién hechas de agua:
entra por todas las ventanas olorosas,
sale con traje de oro
y cantidad de botas amarillas.
Perfecta desde la cintura,
el abdomen rayado
por barrotes oscuros,
la cabecita siempre preocupada
y las alas recién hechas de agua:
entra por todas las ventanas olorosas,
abre las
puertas de la seda,
penetra por los tálamos
del amor más fragante,
tropieza con una gota de rocío
como con un diamante
y de todas las casas que visita
saca miel misteriosa,
penetra por los tálamos
del amor más fragante,
tropieza con una gota de rocío
como con un diamante
y de todas las casas que visita
saca miel misteriosa,
rica y
pesada miel, espeso aroma,
líquida luz que cae en goterones
hasta que a su palacio colectivo regresa
y en las góticas almenas
deposita el producto de la flor y del vuelo,
el sol nupcial seráfico y secreto!
líquida luz que cae en goterones
hasta que a su palacio colectivo regresa
y en las góticas almenas
deposita el producto de la flor y del vuelo,
el sol nupcial seráfico y secreto!
Pablo Neruda
OOOOOHHH!!! maravilloso Maida!!!! y con el poema ha quedado más encantador aún!! mis aplausos :)
ResponderEliminarMuchas gracias, Raquel!
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